¿Me oís? ¡No te veo! ¡Qué bajo te escucho! Quien más y quien menos ha pronunciado alguna de estas frases en estos últimos años. El Covid-19 nos obligó a repensar la manera de trabajar y las videollamadas han sido una de las grandes beneficiarias de este cambio. La mayoría hemos ...
¿Me oís? ¡No te veo! ¡Qué bajo te escucho! Quien más y quien menos ha pronunciado alguna de estas frases en estos últimos años. El Covid-19 nos obligó a repensar la manera de trabajar y las videollamadas han sido una de las grandes beneficiarias de este cambio. La mayoría hemos incorporado las calls en nuestro día a día, al igual que el teletrabajo híbrido (aquel que combina tanto el formato online como el presencial).
Afortunadamente, lejos han quedado aquellas pequeñas videocámaras con una calidad de sonido y de imagen pésimas. La innovación ha llegado al sector de las calls con propuestas como la MAXHUB UC M40, una videocámara 360º que ofrece un gran abanico de posibilidades. ¿Y cómo lo logra? Gracias a las cuatro cámaras con las que cuenta y la IA, se puede tener un control total de la imagen y del sonido.
Diseño atractivo y compacto
Empecemos por el principio, el diseño de la videocámara. Nos encontramos con un diseño sobrio, en negro, forma de torre, metálico, sencillo y que, por tanto, encaja con el diseño de la mayoría de oficinas. El dispositivo es parecido a una pequeña torre vertical, de un palmo de altura, por lo que es sencilla de transporte y cambiar de sala, o incluso llevárnosla de viaje.
En la parte superior, encontramos las cuatro cámaras de 5MP y ángulo de visión 360º y súper gran angular. En la parte de arriba, se sitúa un control táctil para mutear el sonido con un solo toque y también los cuatro micrófonos, capaces de seguir la voz gracias a la tecnología de inteligencia artificial hasta un radio de 5 metros aproximadamente. Asimismo, alrededor aparece un anillo LED azul que se ilumina en función del lado por el que entre el sonido. En la parte inferior, ocupando toda la franja, encontramos el altavoz omnidireccional de 3W que permite escuchar el sonido de manera impecable desde cualquier lado.
Una de las sorpresas (y positiva) es la calidad de la cámara. Aparte de verse muy bien en la gran mayoría de situaciones, lo que nos ha sorprendido más es la poca distorsión que hay en la imagen envolvente. Cuando usamos la versión 360º, se ve muy poca aberración del ojo de pez, algo que nos preocupaba al principio.
Hasta siete modos
El dispositivo se puede usar en hasta siete modos diferentes, en función de las necesidades que tengamos en cada momento. Los modos establecidos son los siguientes:
Otra de las ventajas es que es muy fácil pasar de un modo a otro. Tan solo tendremos que apretar el botón que hay en medio y cambiaremos de un modo a otro. Como pega, sería que no podemos elegir directamente el modo que queremos, sino que tenemos que ir pasando modo por modo hasta encontrar el que queremos en ese momento.
El resultado son videollamadas profesionales, con casi nulos problemas de conexión y que facilitan la comunicación entre aquellos que están en la sala y los que no. En nuestro caso, la hemos probado en una sala de tamaño medio y los resultados nos han convencido.
Esta es solo la manera `sencilla´ de usar la cámara. De hecho, MAXHUB UC M40 también ofrece el Modo Profesional, a través del cual podemos controlar hasta el mínimo detalle: las pantallas, el ángulo de las cámaras (algo muy práctico para no depender de pilas de libros para poner la cámara encima), el encuadre, etc. Por ejemplo, podemos utilizar el modo manual, a través del cual podemos ampliar la parte que más nos interese. Algo muy útil cuando queremos enseñar algún detalle. O el Modo presentación, el cual enfoca a una pizarra y al presentador que habla a la vez; y el Modo composición, que permite tener una panorámica y hasta seis recuadros con los participantes en la parte.
Por otra parte, una de las grandes ventajas de esta cámara es su facilidad de uso. Y es que está pensada para que simplemente con enchufarla podamos usarla en cualquier ordenador. Así, con el Plug&Play, y sin necesidad de instalar ningún software, solo tendremos que enchufarla a través de un USB y conectarla a la toma de corriente. Quizá esa es una pequeña pega. Necesitaremos contar siempre con una toma de corriente cercana, por lo que no podremos usarla en según qué espacios, pese a que es muy fácil de transportar.
En cuanto la enchufemos, el ordenador detectará la cámara y ya podremos usarla con las principales plataformas de videconferencia: Zoom, Google Meet, Skype, Webex, etc. Asimismo, también es compatible con la mayoría de sistemas operativos (Windows, MAC y Linux).
En definitiva, apostamos por la MAXHUB UC M40 como la compañera para las videollamadas en empresas donde el trabajo híbrido se ha instaurado de manera permanente. No es de extrañar que haya logrado el Premio Red Dot Design Award 2022.