En 2008 cerca de la mitad de los hogares de España contaban con al menos un ordenador de sobremesa. La presencia de los ordenadores en los hogares del país contaba con una tendencia alcista en la última década y todo hacía prever que el número de ventas de ordenadores de ...
En 2008 cerca de la mitad de los hogares de España contaban con al menos un ordenador de sobremesa. La presencia de los ordenadores en los hogares del país contaba con una tendencia alcista en la última década y todo hacía prever que el número de ventas de ordenadores de sobremesa tenía que seguir creciendo de forma ininterrumpida en los siguientes años.
Sin embargo, el auge de los ordenadores portátiles frenó en seco las ventas de los dispositivos de sobremesa. Y, de hecho, el porcentaje de este tipo de ordenadores en los hogares del país no ha parado de caer en los últimos 15 años. Así lo asegura el Marco General de los medios en España de 2024 publicado por la Asociación Para la Investigación de Medios de Comunicación (AIMC).
Según los datos de AIMC, el año pasado tan solo el 24,4% de los hogares del país contaban con un ordenador de sobremesa. La cifra, a pesar de ser ligeramente superior a la de 2022 (23,4%) constata la caída paulatina de la presencia de estos ordenadores en los hogares de España, que se han reducido a cerca la mitad en tan solo 15 años.
Al lado contrario, encontramos los ordenadores portátiles, que han experimentado un crecimiento exponencial en la última década. En 2008, cuando cerca de la mitad de los hogares contaban con un ordenador de sobremesa, los portátiles solo estaban presentes en el 13% de los hogares del país.
Desde entonces, la presencia de portátiles en los hogares no ha parado de crecer hasta conseguir su máximo histórico en 2023. Actualmente, el 58% de las viviendas del país cuentan con al menos un ordenador portátil. Por su parte, las tablets también han ido creciendo y ahora es un producto presente en el 16,9% de los hogares de España
El principal motivo que explica este auge de los portátiles en detrimento de los ordenadores de sobremesa lo encontramos en su portabilidad. La batería y la capacidad de conectarse de forma remota hace que el portátil se pueda utilizar en cualquier lugar (tanto dentro como fuera del hogar), lo que genera una ventaja competitiva respecto al ordenador de sobremesa. El rendimiento de los portátiles, su adaptabilidad para conectar accesorios y su competitividad en el precio son otros de los puntos fuertes de los portátiles.
Por el contrario, los ordenadores de sobremesa siguen reinando si se elige potencia, capacidad de refriberación y de carga de trabajo. También se ha convertido en el mayor soporte para jugar y en el producto más fácil de incorporar periféricos (como pantallas o teclados). Los puntos fuertes de los ordenadores de sobremesa hacen que tengan un público fiel que difícilmente desaparecerá.