Por José Carrasco

Para poder diseñar algo que merezca la pena para 2025, antes debemos preguntarnos ¿De dónde partimos (2024)? A nivel macroeconómico el consumo en general en toda Europa es bajo para el potencial que tiene y esto viene del enorme nivel de incertidumbre actual que no ayuda a estimular el consumo (temas Ucrania, Oriente Medio, Estados Unidos, etc.).

Seguimos retrasados en Europa en innovación y en España peor y otro tema que no funciona es convertir los enormes fondos europeos que recibe España en inversión empresarial que genere empleos, nuevas empresas e innovación. El 82% de los fondos recibidos no están todavía en activos concretos que generen riqueza. Si solo hemos sido capaces de ejecutar el 17,5% aproximadamente es obvio que no hemos sabido gestionar este importante caudal de recursos económicos en favor de actividad económica nueva o renovada.

Por otro lado, tenemos un récord en España en absentismo laboral que nos hunde a las pymes y a las micropymes.

Otros factores a tener en cuenta a la hora de presupuestar 2025 en las empresas españolas son:

La rentabilidad bruta de las pymes ha caído nada menos que un 12% desde 2019.
El 85% de los empleos españoles están en las pymes y micropymes.

La productividad ha bajado un -3,8% en los dos últimos años en España y estamos por debajo de la media europea.

La inflación desde 2021 también nos ha perjudicado, aunque está mejorando algo.

Las nuevas cargas tributarias y especialmente las subidas de cargas laborales que no paran de crecer desde junio de 2021 y que han subido la barbaridad de un +18,1% desde 2019 deteriora a este tipo de empresas y provoca algunos cierres. Estamos en total hablando de que los costes generales de las empresas suben un +26,8% desde la pandemia. Con la deuda española subiendo un +3,5% parece que el gobierno quiere ordeñar todavía más a las empresas sin ser conscientes de que puede provocar el fin de unas cuantas y llevar al paro a sus empleados.

Hay un incremento de concursos de acreedores de los que algunos se convierten en cierres empresariales. En este 2024 hasta el 30/9 han sido 7.182 las empresas que han presentado concurso que suponen un +26,2% que el mismo período de 2023.
En cuanto al número de empresas las más pequeñas o sea las micropymes bajan el -1,9% desde 2019 o sea estamos estancados o ligeramente a la baja mientras que las pequeñas crecen el 9,9% y las medianas el 9,4%.
 
Un factor positivo son las bajadas de tipos de interés que ha habido durante este año 2024 y alguna más que se ve cerca en el comienzo de 2025. Esto ayuda a que suban los créditos bancarios un +12% a las empresas siendo parecido a 2017 el volumen total y eso sí a menores costes.

En cuanto a las ventas de las empresas crecen +5,2% desde 2019 siendo muy diferentes según tamaños, ya que las pequeñas solo crecen en ventas un
+0,6% mientras que las medianas crecen un +14,5%, insuficientes para cubrir costes.
En cuanto al empleo crece en este 2024 un +1,9% que es el menor avance en los últimos 3 años.

Con todos estos factores hay que hacer las previsiones en las pymes españolas no tienen viento a favor sino más bien en contra y aunque saben gestionar en momentos delicados ahora hay que hilar más fino que nunca para poder subsistir a corto plazo y ya veremos si se puede invertir algo.

Lo malo es que sin inversión en mejoras las empresas cada vez lo tienen más complicado y no le llega a la mayoría para hacer planes, una pena.

La pregunta más importante que debemos hacernos ahora es ¿Qué nos ha enseñado este 2024?

Esperemos que haya un cambio en el ambiente y se valore más a las pymes españolas dejando de atacarlas psicológica y económicamente porque son mayoría en el tejido empresarial y cada país debería proteger y apoyar lo que tiene.

Hay que desearles unas felices Navidades y un año nuevo próspero a todas las empresas españolas, ya que algo que parecen no entender en este país muchas personas es que, si a las empresas las va bien, a los empleados les va bien, pero si les prometes a los empleados el paraíso y luego les dejas sin empleo es malo para toda la sociedad.

-La incomprensión del pasado nace de la ignorancia del presente.
-La humanidad es más importante que la estupidez de los políticos.
-Necesitamos sabios, no listillos.
-Solo la cooperación ha salvado a nuestra especie.

FELICES NAVIDADES Y UN 2025 MAGNÍFICO PARA TODOS.